Un postre fácil y con una presentación que encantará a los más pequeños de la casa.
- 1 lámina de Hojaldre
- 1 Huevo batido
- 500 ml de Nata para montar (35%m/g)
- 110 gramos de Azúcar glasé
PREPARACION
Precalentar el horno a 180º y colocar un lámina de papel de hornear sobre una bandeja de horno.
Cortar las láminas de hojaldre en tiras de 1cm. de ancho y enrollarlas en los canutillos de metal.
Colocarlas en la bandeja de horno y pincelarlas con huevo batido.
Hornear de 10 a 15 minutos hasta ver que el hojaldre está dorado. Y así se van haciendo varias tandas de canutillos hasta terminar con el hojaldre.
Mientras, podemos ir montando la nata. Es importante que la nata esté fría, recién sacada del frigorífico. Montar los 500 gramos a la vez, ya que es poca cantidad.
Una vez lista la nata montada, incorporar el azúcar glasé y con la ayuda de una espátula de silicona remover bien la nata para que se junte con el azúcar.
Verter todo en la manga pastelera. Poner la boquilla que más nos guste y por último rellenar los canutillos ya fríos.
Colocarlos en una fuente y … ¡¡listos para comer!!.
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