Capirotada
Posted by: Anita Dinamita
marzo 29th, 2024 >> Postres de Cuaresma, Postres del Mundo, SEMANA SANTA - Postres |
La capirotada es un dulce típico mexicano en cuaresma y Semana Santa.
Su nombre, capirotada, nos da una pista de por qué se come en Semana Santa y de su gran carga simbólica religiosa.
El nombre de este postre viene de “capirote”, como se le conoce a los gorros altos y puntiagudos que se usan en las procesiones de Semana Santa.
Pero esa no es toda la carga religiosa, pues sus ingredientes principales tienen una razón de ser: el pan viejo alude al cuerpo de Cristo un poco desmejorado mientras que la miel asemeja su sangre; la canela hace referencia al madero y los clavos al material que se utilizó para ponerlo en el madero.
Se dice que el queso hace referencia a la manta blanca con que se le cubrió mientras que otros ingredientes como las chispas de sabores, los frutos secos o el coco rallado son más actuales y se agregan dependiendo de la preferencia de quien lo prepara.
En este postre encontramos un contraste de intensos y deliciosos matices. Hay un ingrediente que aporta un punto de sabor inigualable que tal vez sea difícil de encontrar en España, ese ingrediente es la miel de piloncillo. Podemos sustituir la miel de piloncillo por un almíbar especiado con azúcar moreno según indicamos en esta receta.
Dependiendo de la región donde se prepara la capirotada, el acompañamiento de frutos secos y el queso pueden variar.
INGREDIENTES
- 200 gramos de azúcar moreno
- 3 clavos
- 1 cucharada de canela
- 400 ml de agua
- 1 barra de pan duro
- 40 gramos de mantequilla
- 60 gramos de pasas
- 60 gramos de nueces
- 60 gramos de cacahuetes
- 60 gramos de queso o requesón
- Bolitas de colores comestibles al gusto
PREPARACION
Empezamos la receta preparando el almíbar que dará jugosidad al pan duro. Para ello, en un cazo incorporamos 200 g de azúcar moreno y calentamos a fuego suave. Añadimos 3 clavos de olor y 1 cucharada de canela. Vertemos 400 ml de agua y removemos constantemente.
Es importante mantener siempre una temperatura de fuego suave y remover frecuentemente. Pasados 10 minutos conseguiremos la textura deseada. Para esta receta, como el almíbar tiene que empapar bien el pan, es importante que no lleguemos a una textura jarabe.
Una vez hemos preparado el almíbar continuamos con la cocción de 1 barra de pan duro. Para ello, la cortamos en rodajas y untamos cada rodaja con mantequilla, necesitaremos en total unos 40 gramos de mantequilla. En una cazuela amplia, doramos las rebanadas de pan por ambos lados.
En una bandeja apta para horno, colocamos de manera ordenada las rebanadas de pan que hemos dorado en el paso anterior.
A continuación, mojamos bien el pan con el almíbar, reservando un poco de este para la segunda capa de pan.
Cubrimos toda la superficie del pan con 30 gramos de pasas, 30 gramos de nueces, 30 gramos de cacahuetes pelados y 30 gramos del queso o requesón. Lo habitual es utilizar queso fresco o añejo. En esta ocasión, se ha usado requesón que combina a la perfección con el dulce del almíbar y los frutos secos.
Colocamos otra capa de pan por encima de estos ingredientes.
Empapamos bien el pan con el almíbar restante.
Incorporamos los 30 gramos de pasas, 30 gramos de nueces, 30 gramos de cacahuetes pelados y 30 gramos de requesón restantes repartidos por toda la superficie del pan. Introducimos en el horno precalentado a 220 ºC y horneamos durante 10 minutos hasta que la capirotada esté bien doradita.
Servimos en la misma bandeja donde la hemos horneado o en raciones individuales decoradas con bolitas de colores comestibles. Esta es una preparación perfecta para degustar templada. La receta tradicional no lo incluye, pero una bola de un buen helado de vainilla le va como anillo al dedo.
Leave a Reply
XHTML: You can use these tags: <a href="" title=""> <abbr title=""> <acronym title=""> <b> <blockquote cite=""> <cite> <code> <del datetime=""> <em> <i> <q cite=""> <strike> <strong>